Mucha no ha sido la gente que se ha sorprendido con la derrota del tandem de Trinidad y José Luis, cuando esta cayó en las primarias.
No era de extrañar, ya que era algo que sin duda tenia que pasar. La gente confió en él la legislatura pasada a pesar de todos los encontronazos que tubo. Aun así España lo apoyó, pero este no podía perdurar mucho.
Es cierto que el ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, pero tras caerse la segunda vez empieza a recapacitar. No ha sido su primer traspié, si bien podemos recordar múltiples. Por ejemplo no haber cumplido casi ninguna de sus promesas de campaña podría, sin duda alguna, ser uno.
Empezó mal sus andaduras si bien recordamos que las primeras elecciones que ganó estuvieron marcadas por un atentado. Para mi, el máximo beneficiado de un acontecimiento, siempre es el mas probable causante. Pero bueno dejando este tema al margen, podemos hablar del fracasada gestión económica y laboral. Todo ha sido un desastre, ya sea la mendicidad para sacar unos presupuestos, la política fiscal o la laboral, algo latente en los últimos días. Ahí están los cuatro casi cinco millones de parados, o los datos del PIB, que nos dejan ya en un puesto por detrás de Brasil que ya nos ha superado. Las previsiones del Fondo Monetario Internacional, no nos auguran tiempos mejores, ni la voz de los expertos, como el premio nobel de Economía, Stiglitz advierte que España "puede entrar en una espiral de la muerte" comparable a la que condujo a Argentina a la crisis de 2001.
En el ámbito internacional, no podemos considerarnos mejor parados si recordamos nuestros acercamientos a los que podríamos denominar presidentes de las repúblicas bananeras de la actualidad, como los de Cuba, Marruecos o Venezuela. Que han llevado al deterioro de nuestra imagen en el exterior.
En el ultimo ciclo político, el de nuestro actual presidente, los jóvenes han sido los máximos perdedores, la tasa de paro para estos ronda el 40%, arruinaron una generación en su anterior oportunidad y vuelven a fracasar en este aspecto en esta.
Así, podríamos seguir describiendo todos los errores hasta la fecha, como la cultura, que podríamos denominara “la de la ceja” o la educación, la manipulación de la información, la confusión de poderes, la política territorial, la ley del aborto, y así un sin fin de materias que ha suspendido.
